jueves, marzo 8

Los axolotl a veces también son sirenas

ni de aquí
ni de allá
ven conmigo
sirena...

yo te acojo en mi ser

podes respirar
mi sangre,
nadar en
los rincones
de mis dudas

a cambio sólo
te pido
los secretos
del abismo
azul

que gota a gota
se d e rr a m a
por los trozos
tornasolados
de tu armadura

canta que mi alma te busca

esperando
¡inútilmente!
ser atrapada

pero luego,
un chapoteo,
burbujas saladas
que me despiertan
de un sueño
casi eterno

yo también
soy sirena
y vos,
lector
caiste en las redes

ocultas y no tanto

de otro más
de mis
engaños

viernes, marzo 2

aun perdida entre sombras quiero que sea eterna

debajo de tu piel
hay mucho mas

mas allade la grasa
y las venas

donde corre tu ser
ahí reside
tu belleza
y tus ojos azules
lo son aún más

el brillo omnubila
y no hay medidas


solo un músculo fuerte
y un alma etérea

martes, febrero 27

Agua, sobre tu cuerpo

El mundo se detuvo
por un segundo
su aliento perduró
en el espejo

perturbado

la lluvia
caía gota
a gota

y la tierra
recibió sus golpes
con la más
pura ternura
masoquista

aquí y allá,
rítmicos
interminables.

En una exhalación
todo había terminado
y un brote se abrió paso,
huérfano y ajeno
a su historia de dolor.

viernes, febrero 9

pandora también

en vaivenes
en susurros

en esos lugares
tan recónditos
que son
inalcanzables

en tropiezos
en delirios

en esos lugares
tan accesibles
que son
inimaginables

en libros
en espejos

t o d o
dentro mío

deja ya de joder con la pelota

encerrados
en sí mismos
y en otros
y en nadie

cubriéndose
negándose

tratando de ocultarlos
bajo una alfombra

como si fuesen
polvo
mugre
inmundicia

pero los trapitos
siempre
ven el
sol

lunes, febrero 5

Canción de Hollywood

te juro que
mi alma
tembló
por un momento

con la idea
¡profana!
de no ver la hora

de no volver
del momento después
del dolor
de pernoctar

sin causas
sin ganas
sin

pude oír
el eco de
una lágrima

colmando vasos

hecha la ley, hecha la trampa

otra vez aquí
el hijo
pródigo

el que nunca
recibió
un no como
respuesta

a veces lo adivinó
en los ojos
de quienes
callaban

por miedo
indiferencia
y cansancio.

el hermano
era uno de ellos

no sabía él
que el hijo
pródigo

cargaba
en su espalda
sueños frustrados

y la envidia
los carcomía
por dentro

y es otra
historia tan
gastada

que no vale
la pena
gastarse
los dedos

en estas
aberraciones
diarias
fraternales
y eternas.